Con Juan de Dios Moreno, parte importante de la «tramoya humana» del teatro en Antequera

A muchos nos resulta agradable tomar un café. Y hacerlo en solitario no disminuye el placer, si uno se concentra en ello; si es con un molletito antequerano bien tostado por fuera antes de abrirlo y hacerlo consistente con buen oliva virgen extra y buen bellota, mejor. Pero tomar un café y charlar con alguien a quien has visto entregado al Teatro, para que los demás podamos disfrutar, es un premio añadido.

Nos sentamos un rato y pude preguntarle algunas cosas para conocer algo más sobre tanto éxito de este arte celebrado esta temporada en Antequera.

Juan de Dios Moreno es el Presidente de la Asociación Cultural Antequera Teatro, asociación cultural sin ánimo de lucro para la promoción y dinamización del teatro en Antequera.

Nada más verle en el lugar de nuestra entrevista le aplaudí como representante que es de muchos otros actores, actrices, directores y directoras que han alegrado mi vida, en este tiempo que vivo en esta ciudad paraíso, con representaciones dignas del más prestigioso teatro y de la capital más activa del mundo, aunque se realice en una sala modesta, eso sí, suficientemente acogedora.

No es fácil hacer teatro de cercanía y dejar que el espectador «rompa» desde ese lado «la cuarta pared» que los actores ven desde el suyo.
Y le aplaudí también a él personalmente porque al igual que toda obra teatral necesita una tramoya detrás del espectáculo, hay otra «tramoya humana», normalmente oculta, que hace posible que sucedan cosas tan hermosas como las que hemos visto en esta temporada de teatro en Antequera. Gestión nada fácil que carga él como presidente de la Asociación y su equipo y que llevan de maravilla.

Me dice que solo acepta una parte de esos aplausos, que el resto se los dará directamente en nuestro nombre a todos los que lo han hecho posible: actores, profesores, directores, diseñadores, sonido, iluminación, tramoyistas, alumnos… Me dice que él es uno más. Incluso me habla también de la importancia de los espectadores como parte fundamental para que se produzca la magia del Teatro.
| me gusta la gente así, humilde, que comparte el éxito sabedor de que son muchos quienes tienen el mérito |
Me permito «le» chascarrillo de decirle con máximo respeto, pero con claridad evidencial, que cuando necesiten representar Cyrano de Bergerac es indiscutible su papel como actor principal, porque no necesitará caracterización física ya que es evidente su parecido. (Ver fotos de Cyrano, no de Gêrard Depardieu cuando lo filmó, sino del auténtico y os recordará a Juan de Dios ).
Me podía haber dedicado por ello una mirada inquisidora y, sin embargo, me dedicó una sonrisa.


¿Quién eres, Juan de Dios?
Soy un aficionado desde hace muchos años al Teatro.
¿Tú eres actor?
Amateur.
Bueno, pero yo te he visto… muy profesional.
Somos todos amateurs. Bueno, excepto los profesores y algunos y algunas que están consiguiendo trascender nuestra geografía.
¿O sea que además de gestionar te diviertes actuando?
Para mí y para muchos, hacer teatro es jugar. Meterte en otro personaje… y cuanto más juego, mejor me lo paso. Y creo que cuando el público nos ve que lo pasamos bien, se contagia de ese juego.
¿Parecido a una simbiosis de transmisión de energía y de mensajes?
Sí. Cuando estamos interpretando y ves que empieza el público a soltar alguna risa o notas esa energía que te acompaña, los ves metidos en la obra… eso te hace actuar mejor, porque ya te creces un poco más. Entonces tú les alimentas a ellos y ellos te alimentan a ti. Nos retroalimenta el público.
La verdad es que yo siempre veo una calidad en vuestras representaciones que entiendo que sois profesionales todos.
Somos amateurs con mucha afición. Y eso si, muy receptivos a la indulgencia que los espectadores tenéis para nosotros. A los actores profesionales el espectador le exige más, porque espera más de ellos. Con nosotros median otras ventajas y cierta misericordia vecinal. También es verdad que entre nosotros hay bastantes actores y actrices aficionados con mucho oficio y con mucho arte, que hacen un extraordinario papel y que podrían actuar en Teatros de primera.
Bueno, yo te insisto en que os veo geniales.
Quizás por eso, porque tenéis cierta condescendencia por no ser profesionales. Entonces yo creo que jugamos con esa ventaja.
¿Tu profesión no es esta?
No, yo trabajo como arquitecto técnico para el Ayuntamiento. El Teatro es mi segunda vocación.
¿Y cómo te pellizcó el gusanillo?
Entré de la mano del club de Leones de Antequera que hace mucho tiempo, como 30 años. En los años ochenta y tantos o así, ya por entonces ellos hacían obras de teatro. Yo recuerdo haberlas visto en el anfiteatro del Teatro Torcal. Cuando vi a gente aquí en Antequera haciendo teatro, que no eran actores profesionales, pues me llamó mucho la atención y soñaba en poder hacerlo yo también algún día.
La historia de ello es larga de contar, pero llena de vida, facilitada por mi hermano, mi mujer y una vecina también compañera hoy de afición y de junta directiva. Una cadena de acontecimientos me trajeron aquí… entonces pues te encuentras llevando esto, siendo actor, siendo alumno; bueno, actor aficionado, amateur y nada… intentando llevar también esto de mi labor en la Asociación todos los años que me toque para que salga adelante.
En la estructura del teatro aquí en Antequera, ¿hay una escuela, hay una escuela y una asociación que nutre esa escuela o es al revés o no se nutre ninguna entre sí?
Sí hay una Escuela Municipal de Teatro, la EMUTE. Como el Ayuntamiento no tiene directamente personal que pueda llevar la escuela, los profesores de ahora vieron la necesidad de crear la asociación para que gestionara la escuela municipal de teatro y por eso nace la Asociación Cultural Antequeera Teatro para que pueda llevarse a cabo también esa gestión y realizar esas clases. Los estupendos profesores que tenemos hoy día en la EMUTE son profesores titulados, que hicieron la carrera, la EsAD, y además tienen el CAP, es decir, también tienen una certificación de adaptación pedagógica para poder enseñar.


¿En la escuela puede entrar todas las personas que en tiempo de pre-inscripción lo soliciten?.
Sí, siempre que no nos desborden las plazas. Y podemos decir con orgullo que es una escuela inclusiva. Tenemos el privilegio de que se encuentren entre nosotros personas invidentes, compañeros síndrome de Down, Asperger… que aportan sus diferentes personalidades a nuestros cuadros teatrales con tanto o más mérito que el resto, con extraordinaria normalidad, como no debería ser de otra forma.
| ¡Ole tú!, ¡Ole vosotros! |
¿Hay muchos alumnos en la Escuela?
Este año en la escuela municipal, contando también los infantiles, hemos llegado a 116 alumnos.
Y en vuestra asociación, ¿cuántos actores y actrices hay?
Somos unas 78 personas. Hay gente que no son actores, también tenemos asociados que les gusta ver teatro, y aunque no se ven capaces de actuar quieren estar ahí. Entonces, tenemos asociados que hacen de público y asociados que son alumnos. No todos los alumnos son asociados, porque si no, seríamos doscientos y pico, más el público a quienes consideramos asociados ambientales porque nos asisten cada obra con su presencia. Paso a paso iremos creciendo.
No sois pocos y se os nota bien avenidos, con mucha energía, con mucho buen hacer y dáis mucha vida cultural.
Como es el proceso resumido de elección de una obra en la Escuela y de la asignación de actores
La obra de teatro la busca el director en función al grupo que tiene. Normalmente los grupos andan sobre unas diez personas. Ellos son los que van a trabajar la obra y hacen unos juegos previos, cuando en los primeros días de clase, con la improvisación, el director está buscando el perfil del actor que pueda desempeñar cada papel. Y a partir de ahí, se sugiere… mira, me gustaría que tú hicieras este, tú el otro… Se hace una lectura completa conjunta de todo el reparto, que llamamos a la italiana. Sentados, cada uno lee un personaje y cuando ya definitivamente se asigna, es momento de cada actor o actriz de empezar a pensar y a dar vida a ese personaje…
A partir de ahí debes estudiarte muy bien el texto, intentando aportarle a las intenciones que podría hacer ese personaje. Después vienen los ensayos y… todo lo demás
Imagino que lleva mucho tiempo y aunque en las representaciones lo hacéis muy fluido, no parece fácil si se piensa en todo lo que hay detrás: memoria, expresión corporal, continuidad en la réplica, histrionismo, vocalización…¿?. Y el tiempo que lleva a diario de la vida normal… Un aficionado como tú, ¿cuántas horas dedicas a preparar actuación?
Bueno, yo, claro, como mi vida laboral es toda la mañana, normalmente suelo por las tardes, aproximadamente, echar alrededor de cerca de una hora y media. Lo lees, lo relees para que te quede claro el personaje y el contexto, y eso, y pensar, interpretar… Eso sí, hasta el último día estás pensando en variaciones, adaptaciones de tu propio personaje, cambios,.. si la obra se estrenara dos meses después, también llegarías al último día con ese nivel de autoexigencia.
¿Y este año, por ejemplo, un actor aficionado, tú, cuántas obras has representado como actor?
Bueno, este año, la obra de teatro del curso. También estuvimos representando, que se estrenó el año pasado, Anillos para una dama, y la hemos reeditado. Y después la que queremos hacer como algo que es ya tradicional, el día de todos los santos, Don Juan Tenorio. Así que al final del año habré actuado en tres obras.
Al margen de la escuela, ¿hay otros grupos o personas que actúen en otras obras distintas?
Pues que yo sepa, grupo de teatro aquí en Antequera paralelos no hay. Actores profesionales sí, Jamp Palô, que es antequerano es un actor famoso y muy bueno que está por la Universidad de Málaga y viene a actuar bastante a su ciudad; actores que son nuestros profesores también tienen su compañía que es La Caseta Producciones y también hacen sus representaciones y pertenecen así mismo a otra compañía que se llama El Ojo del Iglú, que por cierto, representan en Córdoba, Lucena y moviéndose por toda Andalucía, un Don Juan Tenorio con mucho prestigio profesional.
A Antequera suelen venir otras compañías dentro del circuito Culturama y actores y actrices en distintos eventos que el Ayuntamiento a través de la Biblioteca y de otras instituciones convoca a lo largo del año, pero de forma estable es nuestra Asociación quien mueve la vida teatral.
Hay profesionales de altura como Jordi Aguilera, Elena Moreno, Paula Ramírez, Cristóbal Pérez que, aunque tampoco viven aquí, vienen a diario a funciones de enseñanza en la Escuela y a representaciones distintas a lo largo del año.
También hay actrices que están teniendo una importante proyección fuera de Antequera en representaciones teatrales y películas, como es el caso de Carmen López Partida, Olga Montemayor, Marina Pérez, Ana Muñoz…
| No cesaba de darme nombres, que no se enfade nadie por no citarlos aquí, eran muchos y no los iba a recordar. Fui yo quien le dijo que prefiero empezar a conocerles y poner foco en directo uno a uno, una a una, al hilo de las próximas representaciones, ahora que he asistido como espectador maravillado de sus actuaciones |

En la vengaza de Don Mendo había una actriz que hacía maravillosamente bien de Don Mendo. ¿Es porque faltan hombres?
Es Marina Pérez. Fue un giro de ingenio que el profesor quiso dar a la obra, para llevarla un poco más al disparate. Fue licencia genial del director que veía en ella las cualidades para hacer un Don Mendo como él quería y por qué no cambiarlo de sexo.
La representación fue admirable, ella y todos los papeles. Yo aplaudí mil veces en la sala y hasta en mi casa cuando la volví a ver semanas después en el vídeo de vuestro canal de youtube. Recuerdo que pensé en ese detalle, que tal vez en la Escuela hubiera un desequilibrio en el plantel de hombres y mujeres.
No, no, porque si no, se le hubiera dado don Mendo a algunos de los alumnos masculinos y el resto se podían haber cambiado, pero el profesor quiso que fuera ella.
A propósito me parece muy generoso por vuestra parte que después de unas semanas subáis a vuestro canal de youtube las obras que váis representando. Y me sorprende el nivel de calidad de la grabación.
Queríamos tener guardado ese recuerdo de todo el trabajo y decidimos contratar a un cámara, y se hace público por una parte para tener testigos del trabajo que se hizo; por otro lado, para que lo puedan ver quien no pudo asistir. También nos sirve cuando ya no tienes metido el texto en la cabeza para disfrutarla de otra manera como espectador, incluso para aprender, «este texto lo voy a hacer así», corregir, etc.
Insisto en que a mí me parece un gesto bastante generoso por vuestra parte porque permite ver vuestras obras íntegras a quien por miles de razones no pudieron hacerse con una entrada o a personas imposibilitadas de salir a la calle…


He visto que habéis llenado en todas las obras que habéis puesto en escena.
Sí, estamos agradecidos al público porque prácticamente hemos tenido lleno al 100% en todas las obras. Alguna butaca libre a última hora responde a que alguien la adquirió y al final no pudo asistir. Cosa normal cuando se adquiere con anticipación y te surge un impedimento de última hora.
¿Notáis que hay afición a esta faceta de la Cultura en Antequera?
Como lo estamos viendo lleno, sí, podemos concluir eso. Si calculas la proporción de personas que van al teatro en las capitales en proporción al número de habitantes que tiene esa ciudad, nuestro caso es muy positivo. Sobre todo de personas fieles al teatro aunque no tengan la posibilidad de asistir a todas. Simpatizantes y asistentes discontinuos también hay muchos. Y lo que tú decías, la gente que ve nuestras obras en youtube, por no poder asistir en vivo. Es muy difícil constatar la afición real, pero estamos contentos de lo que vamos viendo como respuesta.
Tendremos ocasión de hablar más veces a lo largo de los próximos meses, pero de aquí a final de año ¿qué proyectos divisáis?.
Otras veces hemos hecho también un Belén Viviente teatralizado. Lo hicimos hace tres años en el patio de San Juan de Dios, pero se quedaba un poco pequeño. El año siguiente lo hicimos en el patio del Ayuntamiento, del edificio principal, pero llovió. Entonces había varios pases durante varios días, pero sólo hicieron un par de ellos. Y el año pasado quisimos llevarlo al interior de la iglesia de San Juan de Dios, pero estaba organizado hacer el Belén napolitano, que hacía la Residencia de San Juan de Dios, y entonces no pudimos hacerlo.
Si este año está disponible…, porque ya lo que no queremos es exponernos a un espacio fuera porque no llueve mucho en Antequera, pero a nosotros sí. Yo sufría más por el técnico de sonido e iluminación, que tenía allí su material y estaba expuesto. Entonces pues no estábamos a gusto. Aparte que también te puedes dar una descarga.
Si este año vemos que confluyen los astros, haremos el Belén Viviente Teatralizado.
Y bueno, y el principio del curso, pues para que los alumnos nuevos vean lo que hacemos, por si alguien no ha venido a vernos, intentaremos repetir alguna obra que ya decidiremos cuál será, no todas, pero alguna de las del ciclo de obra, o a lo mejor poner en pie de nuevo alguna.
¿Qué significa para ti como presidente de la Asociación de Teatro y como actor que abran el Torcal?
Siempre es un notición y algo muy bueno para celebrar la cultura en una ciudad como la nuestra. Hombre, el Teatro Cine Torcal tendrá unas condiciones que permitirán una facilidad mayor y la celebración de espectáculos de cierta envergadura. A nosotros nos vendrá muy bien como parte activa de algunas y también como espectadores pasivos de esas representaciones. Tenemos amor al Teatro y es una buena noticia poder practicarlo y asistir a otros espectáculos para los que no había auditorio preparado.
La Casa de la Cultura, con sus inconvenientes ha cumplido un papel y una fase, que tampoco damos por terminada, y estamos agradecidos porque hemos celebrado el teatro de cercanía con condiciones nada fáciles: camerino para diez actores y actrices a la vez, tres paredes constriñendo al escenario con salida directa a ventana de la calle…si tú te sientas como espectador a mano derecha, la anchura que hay es la misma que puede ver uno desde la cortina hasta la pared. Ahí ya el resto es la calle. Entonces claro, entrar y salir por ahí es complicado, claro, hay veces que tienes que salir por la derecha y veces que tienes que salir por la izquierda, en fin…, pero hemos estado felices.

Tenemos que adaptarnos al mayor aforo, que yo creo que tiene sus pros y sus contras. Cuando hemos actuado en el antiguo Teatro Torcal, necesitábamos micros y al final lo que la gente oye es casi como una grabación, no oye teatro puro con la voz pura; en la Casa de Cultura eso sí se da en un espacio pequeño y entonces ahí el teatro es más cercano, porque es de viva voz. Tiene ese calor entrañable de la cercanía.
Hay que tener mucha memoria para ser actor o actriz, recordar guiones como los que habéis puesto en escena tiene mérito.
Y mucho respeto por no salirse del texto para no impedir la réplica y mucho compromiso con el equipo para facilitar su brillo y…
Ya, imagino, y mucha técnica y algo de don natural y querencia y … no todos estaríamos capacitados para interpretar un papel.
Bueno, también tienes que tener una llamada a ello y gustarte, después es cuestión de perseguirlo y casi siempre se consigue. Algunos y algunas con más arte, claro.
Y tú mismo tienes que trabajar cómo adaptarte a cada personaje. Tiene que ser muy difícil, ¿no?
Hombre, también, quizás no valore la gente el trabajo del director. El director es un organizador y el que te da las pautas de lo que hacer. Todo va guiado por ellos, que hacen un trabajo estupendo y yo creo que la mitad de los espectadores se cree que los actores se saben colocar solos, pero no, no. Ahí cuando te sientas, cuando te levantas, todo eso es del director. Mucho porcentaje del trabajo va dirigido por quien dirige, aunque cada actor o actriz tenga su duende.
Claro, porque yo he visto que en las obras, prácticamente, no puede haber parón en la continuidad de un diálogo, lo que llamáis réplica ¿no?
Claro, tiene que ser instantánea prácticamente. Para todo eso hay mucho ensayo. Como haya ahí un segundo de tiempo ya te has perdido. Claro cuando estudias en tu casa el guión tú sabes la palabra después de decir una frase, después de decir la siguiente, si en la de en medio tienes que hacer la réplica. Lo suyo es leérselo y aprenderlo bien, Lo haces en casa, pero cuando a ti te la dan de viva voz y ves que actúas, que se ha girado y tú en la mente, en tu casa, pensabas que estabas en otra posición, te puedes perder, porque tienes una composición que lo hace complicado. Es el ensayo, el que soluciona junto a la indicación del director sobre el gesto y momento adecuado y al final sale. Pero claro, hay que estudiar todo eso, mucho movimiento, intentar ser muy ágil, no aburrir al público, darle mucho ritmo, que tampoco es fácil. Los directores ahí siempre diciéndonos, «ritmo, ritmo».
Decías que tenías miedo al aire libre, cierto temor de que fuera a llover, que no tuviera el sonido adecuado por las inclemencias del tiempo, las brisas…¿Pero no soléis hacer a lo largo del año ni en primavera, ni nada al aire libre?
Hombre, en primavera nos pilla terminando las obras del curso. Un año hemos hecho teatro clásico, Lisístrata, al aire libre en el patio del Mvca. Lo hicimos como asociación. Y estuvo muy bien porque como ese patio es de dimensiones no muy grandes, entonces había como una comunión entre el actor y el público, y con lo graciosa que era, estábamos todos metidos en la comedia, y nos gustó mucho.
He oído hablar de esa representación, que tuvo gran éxito. ¿No se puede volver a repetir?
Hombre, se podría. Lo que pasa es que cuando estuvimos todo el curso trabajando en las obras de la Escuela y sin descansar en el verano, no fue fácil montar las obras en tan poco tiempo, agotados y con esos calores, pues llega un momento que dijimos… una y no más. Oye, que lo mismo después, otra vez se dice y nos apuntamos todos de cabeza, pero me acuerdo que fue muy duro ensayar con estas temperaturas. El ritmo del final del curso de la Escuela es muy cansado. Muy bonito pero muy cansado para todos los implicados.
¿Sois deficitarios como asociación o no?
No, no porque gestionamos bien lo poco que tenemos. Nos falta local, eso sí. Ahora mismo estamos en el aire, arropados por la buena voluntad de un casero gratuito paciente. Teníamos un local en los bajos del Teatro Torcal, pero con la obra tuvimos que pedir prestado para un mes y llevamos ya muchos más. Esperamos que nos vuelvan a ceder un espacio dentro del edificio ya reformado.
Sería lo suyo, a tenor del bien público que estáis haciendo y sería de sentido común.
Imagínate la cantidad de material que tenemos que tener, atrezzo, bastidores, tresillos, sofás, vestuario de diferentes versiones…

Coincidimos en lo interesante que ha sido esta temporada teatral, hicimos balance de obras expuestas, de la alegría y la semilla cultural transmitida al público con ellas y le agradecí en nombre de tanta gente que hemos disfrutado, le pedí que lleve nuestro aplauso una vez más a actores, actrices, a la Escuela, a los asociados, al Ayuntamiento. !Larga vida al Teatro en Antequera!

Después hablamos de temas personales: cómo y por qué cambió otras ciudades y puestos de trabajo acomodados, por ganar calidad de vida en la suya, aquí en Antequera; de su trayectoria entusiasta en el Teatro…

Pero eso ya fue en un segundo café y sin mollete ni bellota ni oliva virgen extra.

Le pregunté si su familia compartía ese amor por su afición y me contó algo curioso y enternecedor: a su mujer la conoció en el Teatro, fue impulsora de ese amor al Teatro y además se casaron en el Teatro Torcal. ¡Ole!