«Un foráneo en el paraíso». | Blogcity atqmagazine
La Orquesta de Cámara ‘Eugenio Cantos’ de la Real Academia de Nobles Artes de Antequera volvió a enamorar en su ‘Concierto de Reyes’ abriendo 2024 a la vida cultural de la ciudad.
Pudiera parecer un titular fácil por manido, pero es que no me cuadra otra palabra que no sea «mágica» para definir la velada musical a la que pudimos asistir con la convocatoria ‘Concierto de Reyes’ de la Real Academia de Nobles Artes de Antequera y que nos hizo disfrutar como auténticos reyes. (no quieren mis palabras tampoco faltar al respeto de la solemnidad del momento, ni usurpar el rol social «de sus majestades», ni los Magos ni los que rigen algunos países, sino destacar la brillantez de un acto cultural tan bonito, tan bien organizado y tan agradable para los sentidos).
Bajo la dirección de Margarita Bolós Fabaroschi esta agrupación musical compuesta por otras siete féminas, jóvenes interesantes, ya más que promesas por su destreza instrumental, nos hicieron desaparecer dentro, llevando la música a otro mundo en el encuentro con Vivaldi, Locatelli y Telemann, geniales y coetáneos en Barroco.
Violines I:
Marta Conejo Ruiz, concertino
Ana Gallardo Navas
Violines II:
Teresa Villarejo Caballero, principal
Guadalupe Melero Molina
Viola:
Paula Clavijo Peral
Violonchelos:
Lucía Olmedo Cañas, principal
Sonia González Martínez
Interpretaron, de Vivaldi, de su Concierto en La menor RV161: Allegro | Largo | Allegro. De Locatelli, Concerto Grosso op1 nº11: Largo | Alemanda, Allegro | Zarabanda. Largo | Giga. Allegro. Concerto Grosso op1 nº3 sus movimientos Largo | Vivace | Allegro. De Telemann, Suite burlesque Don Quixote TWV 55: G10, Obertura | El sueño de Don Quijote. Andantino | Ataque a los molinos de viento. Moderato | Los suspiros de Dulcinea. Andante | El manteo de Sancho Panza. Allegro Moderato | El galope de Rocinante y el asno de Sancho. Allegretto | El descanso de D.Quijote. Vivace.
Y ¡por si fuera poco!, fuimos regalados con el villancico Noche de Paz magistralmente interpretado que puso final a esta matiné en la que la Real Academia ofreció su mejor salón a disposición de la Orquesta de Cámara ‘Eugenio de Cantos’ (OCEC) para disfrute ciudadano.
Los entusiastas aplausos de un público que manifestaba felicidad por lo escuchado, eran prueba notarial de la fascinación del momento en esta matinal del domingo 7 de enero. «Ojalá la celebración de este concierto se convierta en una tradición», comentaban muchos asistentes al finalizar el evento, agradecidos por lo vivido.
Visto lo visto, no creo que nada ni nadie pueda entenebrecer el florecimiento de esta orquesta. La que fuera en 2020 una semilla esperanzadora, se va consolidando y aporta rigor y prestigio musical al panorama cultural de Antequera. Larga vida auguro a ello y larga vida quisiera yo para mí para poder asistir al menos a su decimoquinto aniversario, allá por 2035 . ¡Ojalá!. Y que todos vosotros, lectores y lectoras podáis encontrar en ese entonces mi reseña que diga nuevamente: ¡Qué bonito haberlo vivido y poderlo contar!
Una vez más en Antequera este «foráneo se ha sentido en el paraíso».
Así suenan…
Y nos gustaron mucho:
Mucho, mucho:
