Alguna gente de Antequera hará una escapadita al Ateneo de Málaga este 14 de enero para…

…Escuchar en directo la disertación del gran escritor y miembro de la Real Academia de Artes Nobles de Antequera y de la Real Academia Hispanoamericana de Ciencias, Artes y Letras, Manuel Salinas

Presentará la nueva edición de ‘Nadar contra la corriente’ en el Salón de Actos del Ateneo de Málaga el 14 de enero de 2025 a las 19:00h. … Y seguro que recitará (lo hace con un tono pausado que te envuelve en un silencio reflexivo inspirador) alguna de sus poesías o de sus anotaciones filosóficas de poesía.

Manuel Salinas obtuvo el Premio Internacional de Poesía Dama de Baza 2018 por su Trayectoria poética y el premio de Literatura en español Carmen Luisa Pinto 2012 , Miami (EE.UU).
Ha sido colaborador de Radio Nacional de España y director de la colección de poesía Solarium
(Papeles de poesía), de la revista Tanit ( Materiales para la Cultura).
Dirige la colección de poesía de la Revista Puerta del Mar de la Diputación Provincial de Málaga.
Codirige la colección Pliegos del Rumblar con Ana García Briones, y que ilustró Marite Martín Vivaldi.
También codirige junto a José Antonio González Nuñez la colección Hortus Splendoris

Manuel Salinas en esta Navidad en La Malagueta conversando con este humilde editor de atqmagazine sobre Filosofía Poética (¿O era sobre Poesía Filosófica?) original fusión que representa en el mundo de las Letras cultas que tanto admiro.

José Ignacio Fernández Dougnac escribía en De buenas letras
«La poesía según Manuel Salinas»
Cuando terminé de leer ‘Nadar contra la corriente (Disquisiciones poéticas)’, de Manuel Salinas, tuve la grata impresión de haber recorrido un luminoso
jardín de senderos que se bifurcan.
La conocida imagen de Borges ilustra la experiencia de haber traspasado un
ámbito esclarecedor, poblado por una rica variedad temática. Nos encontramos ante una
exquisita miscelánea (en tanto que congrega el verso con el poema en prosa, el ensayo, el
aforismo y ciertos vislumbres reflexivos, a la manera de Nietzsche), que no pretende, de
ningún modo, reivindicar un tipo de escritura frente a otras tendencias en boga, sino
sondear en un concepto de poesía que nos brinde una singular forma de existencia y una
asombrada actitud del alma. A partir de aquí se establecen dos planos indisociables: uno, el
puramente literario; otro, el más interesante, el de «estado de poesía» (por recordar a
nuestro Rafael Guillén) como redención vital ante la «demasiada realidad», ante ese
relumbrante parque de atracciones sustentado por la nada más absoluta, con «demasiada
noticia, demasiada actualidad, demasiado hueso».
Salinas traza con total coherencia lo que él mismo denomina la «poética del salmón»: nadar
contra la corriente para ascender río arriba, hasta penetrar en lo oscuro, sumergirse en el
misterio, cultivando así la lucidez de «mirar lo que está lejos / dentro del alma» (A.
Machado). La poesía, pues, como modo de vida, tanto a través de la escritura como por
medio de la lectura. Porque «leer es vivir, buscar aquella respuesta que no llega, esa
pregunta por lo que falta y se sospecha»; esto es, «mirar el mundo tal y como
verdaderamente es».
Gracias a esta idea de poesía, que es ‘xenia’, «cena que recrea y enamora» y encuentro con
el «tú esencial» (volvemos a Machado), lo mismo que celebración del ser y de la mirada
primigenia, se trenzan entre sí tres conceptos que dan sentido a la persona: el amor, la
libertad y la esperanza, los cuales apuntan hacia «un destino tranquilizador, […] una forma
de vivir más intensa que nos ofrece la capacidad de inventar otra vez la verdad y de poder
hallar un sentido todavía». Como dijo Joan Margarit, un poeta muy diferente a Salinas: la
poesía es también «una forma de esperanza». Y de todo ello emana algo tan sanador, tan
subversivo, tan frágil y tan fieramente humano como la belleza.
‘Nadar contra la corriente’ es, pues, un libro que alumbra sobre la obra de su propio autor,
al tiempo que nos sirve de brújula de bolsillo para navegar por estos procelosos «tiempos de
nihilismo» y campanuda estupidez