Un «foráneo» en el paraíso» | ChLL para atqmagazine.es
Un encuentro con el arte vivo: la escultura de Juan Vega en el MVCA | Una visita guiada que nunca olvidaré
A veces, una visita a un museo se convierte en mucho más que una actividad cultural. A veces, se transforma en una experiencia íntima, emocionante y profundamente reveladora. Esto es precisamente lo que hemos vivido quienes acudimos este viernes 30 de mayo, con compañeros de Patrimonio, sección que dirige Mary Paz Alba en el CEPER de Antequera, a la visita guiada de la exposición del escultor malagueño Juan Vega Ortega, en el Museo de la Ciudad de Antequera (MVCA).
Y si la obra de Juan Vega es impactante —por su realismo, su espiritualidad y su destreza técnica—, fue la mirada apasionada de la historiadora del arte Marta González la que consiguió que no solo viéramos escultura, sino que aprendiéramos a mirar el arte y apreciemos mucho más cada pieza.
Porque Marta, guía de Ciudades Medias de Andalucía y del Museo de la Ciudad de Antequera, es narradora, pedagoga y cómplice emocional del MVCA. Y nos ha «pellizcado» como casi solo saben hacerlo los poetas. Con un estilo único, profundamente didáctico y cercano, nos llevó de la mano por el universo simbólico de Vega, desvelando secretos, significados ocultos y detalles que habrían pasado desapercibidos a un ojo no entrenado. Pero lo hizo sin academicismos, con mucha preparación previa y mucho mimo sobre la obra del autor, con la sensibilidad de quien sabe que el arte se comprende tanto con la mente como con el corazón.

La exposición permite recorrer el proceso creativo del artista desde los primeros bocetos hasta las esculturas terminadas, todas ellas de una fuerza expresiva desbordante. Las obras, trabajadas en madera, terracota o bronce, logran ese difícil equilibrio entre lo sacro y lo humano, entre lo clásico y lo actual. La devoción, la anatomía, la espiritualidad y la materia dialogan en cada pieza.
Juan Vega no solo moldea figuras: moldea emociones. Y gracias a la interpretación de Marta González, cada una de esas emociones ha cobrado un sentido y un contexto cuando nos lo ha ido explicando a nosotros. …Y nos ha encandilado. Es imposible salir indiferente. ¡Vaya escultor bueno!.