Lleno en San Zoilo para escuchar a Teresa Pérez del Pino

Antequera estaba convocada para la presentación del segundo libro de poemas de esta joven promesa de la Escritura.
… Y la sala de actos de la Biblioteca de la ciudad se llenó como nunca.

«Teresa Pérez del Pino es Andaluza, nacida en Antequera (2001). Finaliza dentro de unos días sus estudios reglados de Psicología y es una apasionada de las letras, de la escritura, de los libros y del arte en general. Una joven con las ideas muy claras y un poco de alma salvaje».

El acto fue presentado magistralmente por Carlos Torres, director de la Editorial ExLibric, sello que arropa y catapulta a Teresa porque han comprobado que ella sabe muy bien cómo convertir en palabras, sus sentimientos e ideas.
Carlos recitó a Octavio Paz, en su poema «Mientras escribo», marcando con ello la línea horizonte de lo que sería luego la presentación impecable de esta joven poeta.

Cuando sobre el papel la pluma escribe,
a cualquier hora solitaria,
¿quién la guía?
¿A quién escribe el que escribe por mí,
orilla hecha de labios y de sueño,
quieta colina, golfo,
hombro para olvidar al mundo para siembre?

Alguien escribe en mí, mueve mi mano,
escoge una palabra, se detiene,
duda entre el mar azul y el monte verde.
Con un ardor helado
contempla lo que escribo.
Todo lo quema, fuego justiciero.
Pero este juez también es víctima
y al condenarme, se condena:
no escribe a nadie, a nadie llama,
a sí mismo se escribe, en sí se olvida,
y se rescata, y vuelve a ser yo mismo. | ^{Octavio Paz}

Carlos Torres, Director Editorial de ExLIbric y Teresa Pérez del Pino, autora de este su segundo libro «A tumba abierta«

Expuso, además, Carlos Torres, un encaje de pensamientos muy elocuentes sobre la Poesía y, para finalizar su presentación, elogios muy bien medidos y acertados a la continuidad y al valor de la obra de Teresa (a quien definió como un enorme talento joven) y a su evolución desde su primer poemario ‘Memorias en tinta negra’ en la que el tiempo, la buena acogida, y ella misma han puesto alas propias a la intensidad poética de aquellas «cicatrices».

«Hemos venido aquí», dijo Carlos, «para hablar de poesía«. «La poesía es un lenguaje que todos podríamos hablar, podría crecer dentro de nosotros; es un lenguaje íntimo sí, pero no viene del poeta…»
«La poesía no ocurre en la imagen del lenguaje, ella es el arte de las palabras. La palabra es su forma de hacerse escuchar. Por eso aprendemos el uso y las posibilidades del lenguaje. Para que ese encuentro con el mundo logre su sentido. Son palabras nuevas, para las que aún no tenemos oído. Palabras que no nos pertenecen en el sentido estricto. Pero por el sentido podemos intuir. Las palabras hablan de la noticia, dicen desde ella, pero no que exista: el poema solo ocurre en el momento en que el lenguaje y la vida se cruzan produciendo un sonido que, a veces, tarda años en surgir»

Continuó, Carlos Torres, «pintando» con palabras, también con mucha poesía, describiendo este lenguaje: que «la poesía no se premedita ni se anima»; que «los poemas son palabras sin dueño que ocurren en el lugar interior lejano de un cuerpo«; que «las palabras que encuentran al poeta y no al revés, son las esenciales, las verdaderamente poéticas, pues son el lenguaje y el susurro, auténtico, y desinhibido, irrumpiendo en otra vida y dándose a escuchar«. Que «la poesía ocurre» que se manifiesta al poeta escuchado, pero que también le hace testigo de algo nuevo que acontece en su interior, de una revelación que no puede llamar suya, por eso… porque la poesía ocurre».

Fue más contundente aún al afirmar que «muchos creen que la poesía solo es el canto a la piel de las cosas, a idealizaciones superficiales lejanas… La poesía es también la aspiración de justicia universal, de dignidad humana y de libertad. Nuestros sentimientos, emociones, los instantes repartidos, la vida y todo aquello que la muere, las certezas o las incertidumbres. Todo lo que nos limita o nos realiza, nos condena o nos libera».

«La actividad poética es revolucionaria por naturaleza. Es un ejercicio espiritual, un método de vibración interior. Es una expresión histórica de razas, naciones, clases, experiencias, sentimientos, emoción, intuición, pensamiento no dedicido. Es hija del azar, escultor del cálculo. Es el arte del hablar en una forma superior. Es el lenguaje dirigido. Es enseñanza, moral, ejemplo, relación, danza, diálogo. Voz del pueblo, lengua de los escogidos…». «La poesía es conocimiento, es salvación, es poder, es abandono».

«El poeta sí puede referirse a su propia manera de hacer poesía. Un poeta no es un ideólogo, desde luego que Teresa tampoco lo es. No es una teorizante de la realidad, sino una hacedora. Y para lograr ese objetivo superior se sirve de la realidad y el esfuerzo, de todos los materiales que les suministra el universo».
Para terminar lentificó su exposición y con gesto pausado, Carlos Torres, miró a Teresa y le dijo concluyente: «Poesía eres tú«.

Mientras ella trasteaba su micrófono, el público asentíamos. No se trataba de la mirada clavada en las pupilas que diría Gustavo Adolfo, sino de todo lo que hay de lírica en esta joven, su naturalidad tan cordial, su esencia, su inteligencia que soporta la construcción de sus palabras, sus escritos que resuenan en otras mentes y en otras almas, como borbotones de la suya…

Teresa no solo habló. ¡Cómo habló!.
Conectó directa con quienes escuchábamos. Con un tono de voz musical y una cadencia de armonía entre sus silencios y sus frases. Tímida, pero segura, sin arrogancia, tierna y afirmada. Crisol de orden mental y de caminante de sueños; a medio camino entre su niña interior y su parte de mujer con tanto bueno que la llena de persona.
Agradeció la bonita presencia de los asistentes y de algunos ausentes que sabía que estaban con ella también en ese «aquí» y en ese «ahora». |Me recordó con ello las palabras de fidelidad a la amistad de Richard Bach en «Juan Salvador Gaviota»|

Nos dijo que antes de ser escritora ha sido y sigue siendo lectora, que el propio Carlos Torres lo reconoció de ella en su primera conversación, ya hace años. «Pero la escritura siempre ha salvado mi vida. La vida me llevó a escribir cuando tenía dieciséis años. Lo típico, tengo un mal día, siempre he sido una persona que me ha costado más relacionarme, más tímida…
La escritura me aportó la fortaleza para poder expresarme. Fue un salvavidas. Me sirvió entonces para llenar papeles de sentimientos de mi vida».

«Con dieciséis años normalmente no hay dinerillo, así que mis regalos a mi familia eran poemas» | ¡Pues qué gran suerte tenía tu familia!, digo yo |.
«Cumpleaños de amigos, cartas de amor… siempre he tenido la escritura conmigo, a mi lado, como una extensión de mi mente y de mi corazón».

«Si mi niña interior de cinco años me dijera que a los veintidós años no solo he escrito un libro, que he escrito dos, no la creería». | No pienses, lector-a, que lo dice con arrogancia. Todo lo contrario, su gesto no verbal denotaba toda la humildad y la sorpresa de haberlo podido hacer |.

Nos habló de las diferencias con su primer libro ‘Memorias en tinta negra’. » Fue fruto de la pandemia que nos asoló a todos, pasando además tiempos de ruptura amorosa personal… yo era un huracán de emociones y me sirvió para poder soltar lastre».
Mis conocidos se sorprendían de lo que había escrito, creían que era un alter ego de la Teresa que conocían detrás de mi cara cercana y me pedían que no lo guardara, que lo publicara. Y pudo ser«.

«Sé que quedan en evidencia mis claroscuros, mis sentimientos en el aire, transparentando mi alma; pero estoy en ello porque así soy yo y lo que escribo es lo que me sale de dentro. Yo escribo con el corazón, con mi alma, con lo que mi mente me ordena…

«Sí puedo pensar que he nacido para escribir, porque la sensación que me aflige y a la vez me consuela, me lleva a ver mi esfuerzo y mi trabajo y mi tembleque cuando me enfrento al papel para que surja lo que nace dentro de mí. La verdad es que me siento orgullosa de ello».

«No escribo para agradar a nadie, escribo lo que sale de mí. «En cada página va un trocito de mi, de mi intimidad. Y la verdad es que te da un poco de vergüenza porque es como un espejo, el libro soy yo, tanto el primero como el segundo».

«He estado días en las tripas de la editorial y agradezco que he comprobado cómo mi libro se ha hecho con tanto mimo por parte de mi sello editorial hasta llegar aquí, en donde me he puesto muy nerviosa a la par que me llena de alegría ver la acogida vuestra».

Cuando agradeció a su familia, a sus padres, a su abuela, a su hermano, a su pareja… puso una emoción especial al recordar que «siempre han estado ahí y aunque no supieran exactamente las palabras que contaba, se conformaban con mi cara en trance que respondía: ¡estoy escribiendo!. Ahora ven el resultado y espero que cuando lo lean se sientan orgullosos de lo que he podido transmitir».

A continuación subió al atril Pilar Ruiz y leyó uno de los poemas de este segundo libro, aludiendo a su emoción y a que define transparentemente el itinerario de la evolución de Teresa como poeta en su propia danza con la poesía. ‘Matrix’ es uno de los poemas que contiene este segundo libro ‘A tumba abierta’.

…Y Teresa Pérez del Pino sonrió dulce y tímida regalando-en su cara agradecida- décimas de segundo al propio tiempo.

Fue entonces cuando ese silencio rompió en aplausos y el artesonado centenario, casi intacto de la sala, «bailó» con las paredes la magia del instante aprobando con su eco tanto bonito vivido y celebrando que este ha sido otro acontecimiento importante entre sus muros.

Fue en la presentación del segundo libro de esta promesa, talento joven, de la escritura, que ya se está consolidando realidad.

Nota de Atqmagazine:
Hemos preferido no transcribir el poema ‘Matrix’, porque nos gustaría sembrar en ti curiosidad por él (es muy bueno) y que te hagas con el libro y lo veas directamente. El talento de Teresa lo merece.
Comprar un libro, posibilita que su autor (en este caso autora) pueda seguir compartiendo su mensaje
(ahora somos nosotros, los lectores, quienes merecemos seguir leyendo tanto bonito). A mí me encantó escucharlo. Búscalo en las librerías de Antequera para que sigan estando y, si no vives aquí, pídelo directamente a ExLibric, que tanto bien está haciendo descubriendo autores.

Carlos L. para ^Atqmagazine | Fue muy bonito para mí haberlo vivido y así lo he querido contar.