Carmen Partida | arte racial en las venas

La he visto actuar en algunas obras de teatro y he observado en usted gestos y porte que me recuerdan a la gran actriz Charo López.
Ya quisiera yo
La he visto actuar en varios cortos de cine y he observado en usted gestos que me recuerdan conceptos artísticos de Anna Magnani
Ojalá
La he visto actuar en varios vídeos y hay en usted modos de Pastora Vega.
Por favor, me sonroja con esas comparaciones. Ojalá algún día pueda tener cualidades que se aproximen un poco al arte de cada una de ellas.
La he visto actuar directamente y descubro en usted, entre personajes sencillos, la fuerza racial de una actriz que se llama Carmen López Partida
Esa soy yo. En carne y hueso, mostrando mi vocación en lo que llaman el cuarto arte (el Teatro) y el séptimo arte (el Cine) que para mí son los primeros.
!Mostrando mucho talento, diría yo!. Pero, ¿usted no se llama Carmen Partida?
Este es mi nombre artístico. Un homenaje personal a mi madre que trasciende mi intimidad y mi maravillosa complicidad con ella, porque es también un guiño a quienes la adoramos, a mi padre y a mis hermanos, y a mis hijos, y a todos los que la conocimos. Le habría gustado verme actuar…pero no pudo ser. A ella le dedico cada escena en la que actúo.
(En este instante un velo transparente y húmedo desdibuja el impactante negro de sus ojos).

Proyecta usted una imagen de persona «distante» y sin embargo hablando con usted rebosa de sensibilidad y humanidad.
A veces las apariencias engañan.
(No es que sea escueta en contestaciones, es que aún estaba en el trance de unas «gotas de lluvia» en su mirada)

«Hay almas a las que a uno le gustaría asomarse como a una ventana llena de luz» | Federico García Lorca

Carmen Partida


¿Usted se considera profesional o amateur?
Buena pregunta. A ver, yo siempre me he considerado amateur porque, para mí, profesional es una palabra muy importante y nunca me la he dado de ser gran cosa, es la verdad. Pero es verdad que cuando ya estás trabajando tanto y te dice la gente, «oye, que esto ya es un trabajo profesional, que lo que estás haciendo no es solo un hobby de ratos de ocio…»
Me cuesta decir que soy profesional, que también me dedico a esto.

¿Le cuesta, pero por timidez?
Sí, por timidez porque…

¿Para que no parezca que es usted pretenciosa?.
Exacto. Porque no soy profesional del todo, ya me gustaría; pero para mí, profesionales son la gente que están allí en lo alto. Entonces…
Aunque algunas personas me dicen -mis hijos los primeros-: «Tú ya no puedes considerarte amateur, tú ya eres profesional con todo lo que estás haciendo».
Pero me cuesta, me cuesta admitirlo. Y si usted me lo pregunta, pues diría que soy amateur.

Yo también entiendo, como esas personas y como sus hijos, que cuando alguien dedica hoy por hoy después de su trabajo en el Museo de la Ciudad de Antequera, tres días de la semana a formarse en estas disciplinas, dos de ellos teniendo que desplazarse a Málaga para realizar entrenamiento profesional; a ensayar horas y horas de cada día en casa en el estudio y memorización de papeles; cuando mientras camina en sus traslados cotidianos, se abstrae inmersa en los distintos diálogos de personajes; cuando los fines de semana se dedica a actuar viajando a otras ciudades; cuando se hacen trabajos remunerados como actriz… digo yo, que se es o por lo menos se aproxima una a ser una actriz profesional ¿No?.
Sí. Tiene razón, no voy a negar que hay ahí mucha dedicación, un día y otro día, un año y otro año, desde hace ya ocho.
Son muchas jornadas de esfuerzo, imagino que tanta entrega sembrada le está dejando una bonita cosecha en cada rincón de su alma.
La verdad es que me hace cada día más feliz esta dedicación, llámela como quiera, afición, vocación, trabajo…

Ocho años no son pocos, ya lo creo, pero entonces ¿ha sido una vocación tardía?
Bueno, de pequeña tenía mucha ilusión en ser actriz, me encantaba, yo veía las películas y mi mente volaba. Me sentía la protagonista de esas pelis, y siempre me ha encantado. Nunca tuve entonces la oportunidad, de ir más allá. Sólo lo típico del colegio, en las actuaciones de fin de trimestre, aunque yo lo que hacía entonces era bailar. Bailaba flamenquillo, bailaba esto y lo otro. Me gustaba mucho bailar. Ya tenía el gusanillo de subir a las tablas. O a las mesas, porque de pequeña en las reuniones familiares me subían a la mesa, mi madre tocaba las castañuelas y mientras los demás hacían palmas, yo bailaba. Algo más tarde, las películas seguían haciendo mella en mí. Recuerdo ver durante horas ‘Grease’ o meterme en el papel de ‘Baby’ Houseman (Jennifer Grey) y que Johnny ( Patrick Swayze) me rescataba en el baile en ‘Dirty Dancing’.

El sueño va sobre el tiempo flotando como un velero. Nadie puede abrir semillas en el corazón del sueño. |
Federico García Lorca

Me apunté a la asociación de Baile de aquí de Antequera, actuábamos en el Teatro Cine Torcal bailando. Me gustaba subirme al escenario, me hechiza bailar.

He encontrado en la Red estos cortes de vídeo de alguna de esas actuaciones de las que habla Carmen. ¡Qué maestría!

En esa época unas amigas mías hacían Teatro. Yo iba a verlas y decía: «quiero estar ahí», pero me veía incapaz. No me veía con fuerza para hacerlo, hasta que un día, es curioso, como era la presidenta de la asociación de baile, fui a la presentación de los talleres al Ayuntamiento y coincidí con Jordi Aguilera a quien ya conocía de Ciudades Medias y me comentó que estaba allí porque iba a presentar un taller de teatro. Me dije a mí misma que si coincidía con un día de la semana que yo no tuviera ocupado, me apuntaría… las clases cayeron en el día en que no tenía otra dedicación y así fue como entré. Era como una señal. Desde el primer momento me encantó.

Carmen Partida


¿Se le olvidaron entonces sus nervios y su miedo a no ser capaz?
Nooo, yo sigo teniendo nervios, no los puedo perder, pero en el momento que piso el escenario me siento como cuando llegas a casa, me siento feliz. La verdad es que los nervios los tengo. Yo puedo salir segura, aunque esté supernerviosa. Todo el mundo me dice que transmito mucha tranquilidad, mucha templanza. Pues tranquila no estoy, estoy superatacada.

Volvamos un poquito atrás, ¿después del colegio no se plantea estudiar Arte Dramático?
Era como un sueño, como eso de que yo quiero ser actriz, pero nunca te planteas que pueda llegar a ser. Es verdad que cuando terminé el Bachiller, que ya estaba aquí en Málaga, sí le dije a mi padre que quería hacer Arte Dramático y estuve incluso investigando en ello, pero en aquel entonces las familias no apostaban por este tipo de carreras y mi padre también pensaba que era un camino poco seguro.

El tiempo va sobre el sueño hundido hasta los cabellos. Ayer y mañana comen oscuras flores de duelo. |
Federico García Lorca

¿Recuerda su primer trabajo remunerado como actriz?
Sí, porque no hace tanto. Era un anuncio con un diálogo corto. Mi primer trabajo fue antes de la pandemia, hice un anuncio para el metro de Málaga, me gustó bastante.

¿En qué obra debutó? ¿Cuál fue la primera?
Fueron primero unas escenas que Jordi Aguilera nos preparó, como éramos del primer año, había gente que llevaba mucho tiempo pero otras éramos principiantes. Entonces montó diferentes retazos de escenas. Hice una escena de dos hermanas. Realmente no me acuerdo del título, porque no era una obra muy famosa.
¿Y a renglón seguido?
En esa época también participé en colaboraciones en ‘La Casa de Bernarda Alba’ y en ‘Bodas de Sangre’.

¿Qué género dentro del Teatro disfruta más?
Haciéndolo, el drama, sin lugar a dudas. Para verlo, todos.
Yo la veo también en el monólogo. Eso sí, probablemente monólogo dramático.
Menos mal porque graciosa no soy, o sea no tengo el humor para ser graciosa, no no me veo cómica.
Me gusta hacer algo de intriga, de suspense… estamos a punto de retomar en Antequera los ensayos de ‘8 mujeres’, dirigidas por Marina Pérez.
La paramos por la pandemia. La protagonista es Carmen Ramos y yo entro en la segunda parte de la obra en un personaje de mujer enigmática. Y me gusta.

Hasta ahora, de las que ha hecho, ¿cuál es su obra culmen?, ¿a cuál le tiene más cariño?.
Lysístrata, de Aristófanes. Una obra clásica del teatro griego donde las mujeres toman una curiosa determinación con el fin de parar la guerra. La hicimos en el Museo de la Ciudad de Antequera (MVCA). Todo ello en clave de humor. En ella, Marina Pérez confió en mí y me dio el papel protagonista, me dio la oportunidad de demostrar que podía hacerlo. Para mí eso fue lo más grande.


Tres adjetivos que definan un poco sus características artísticas.
Nunca me lo he planteado. Yo tengo mucha fuerza. Porque quizás también mi rasgos físicos me lo dan. Como yo digo siempre, a mí no me pueden poner de una mujer desvalida y pobrecita porque no doy el papel. Doy el papel de mujer fuerte, con agallas, porque eso sí lo soy. También muy entregada al papel que tengo que representar. Muy emotiva, valiente, segura…

¡Qué bien caracterizada está usted aquí!. Si la foto estuviera en movimiento, no me podría llevar la contraria sobre sus gestos de actriz de raza, que inspiran Anna Magnani. Que se lo pregunten a Anthony Quinn en ‘El secreto de Santa Vittoria’

Carmen Partida, caracterizada para escena de…



¿Qué talento o qué don le gustaría tener y cree que no tiene?
Hombre, a mí me gustaría tener voz para cantar, la verdad, porque los musicales me encantan. Me encantaría hacer un musical. Bailar no tengo problema, pero cantar me encantaría tener voz para hacerlo. Y no me gusta utilizar play back, no lo veo auténtico, no es real, a mí no me gusta mentir, aunque parece que actuar es un poco mentir, no me gusta tampoco en ese sentido.

¿Tiene claro cuál es su sueño?
Lo estoy viviendo ya. Me da pena haber empezado tan tarde. Eso es verdad. Me da mucha pena. Porque creo, me lo dice mucha gente, que encajo bien en lo que estoy haciendo y que podía haberlo aprovechado 30 años antes… Sí, a mí eso sí me da mucha pena.
Pero soy feliz ahora, escúcheme, llego tarde, pero feliz de la vida porque estoy consiguiendo mis sueños. No todo el mundo puede decir que está viviendo su sueño. Entonces, pues, agradecida a la vida por ello.

Bueno, aún le quedan muchos años todavía para seguir disfrutando, no es usted una niña, pero imagino que se necesitan actrices que ya hayan cumplido los cuarenta.
¡Dónde estarán ya los cuarenta!

Sobre la misma columna, abrazados sueño y tiempo, cruza el gemido del niño, la lengua rota del viejo. |
Federico García Lorca

¿Tiene algún otro sueño en la vida?
No, realmente ver feliz a mi hijos, a los dos, que están bien. Y a mis nietas. Que están bien todos y yo estoy cumpliendo mis sueños, tener salud, ya está, no busco más. No necesito más.



¿Carmen López en la vida real y Carmen Partida en su arte son la misma persona?
Sí. Tal cual, así de transparente.
Defínala, ¿cómo es?
Carmeeeen esss una mujerrrr… Es una mujer… Es difícil definirse una a sí misma. Es una mujer que es buena persona. Y me ha costado mucho aceptar eso, fíjese lo que le digo.
¿Le ha costado aceptarlo o serlo?
Aceptar que soy buena persona. No serlo, serlo sale solo. Aceptar lo que soy. Me cuesta admitir cosas buenas de mí.
Pero es curioso cómo dicen que los hijos aprenden de los padres, pues yo ahora mismo intento aprender de mis hijos que son los que me aleccionan y me intentan abrir los ojos y esas cosas. Entonces pues admito que soy buena persona, mi hija me lo repite a menudo, dice que soy un corazón con piernas.
También soy una persona cariñosa, detallista, también muy impulsiva y es verdad, porque me mueven muchas veces los impulsos.
Después soy muy trabajadora y soy muy competitiva conmigo misma. Cuando hago una cosa es para hacerla bien, si no, no me meto. Y me exijo mucho y me enfado conmigo misma cuando no me sale como yo quiero que me salga. Sí, soy muy exigente conmigo misma. Tengo poca paciencia, pero aguante tengo mucho. Soy muy amiga de mis amigos cuando conozco a una persona y la considero amiga, ya es para toda la vida y para siempre y para lo que haga falta.
Me gusta reír, me gusta… También tengo mi parte loca, por eso es que cuando estoy con mis hijos no paro de hacer tonterías, aunque tenga la imagen de persona seria no lo soy. Y yo qué sé, qué más. Tengo buena memoria, eso es bueno para el teatro.
Bueno, pero esa la ha conquistado, ¿no?
Sí poco a poco, trabajándola, ejercitándola. La memoria es un músculo que aumenta si lo entrenas.

Hace usted cine y hace teatro, ¿por cuál se decanta más?
¡Uffff!. No le voy a decir que el cine sea más fácil, es más pesado, es más pesado porque son muchas tomas. Es más fácil en el sentido de que no te tienes que saber tanto como en el teatro el papel, porque si te equivocas, ¡pum! corta, dilo otra vez. Es muy tedioso porque para grabar cualquier cosa son un montón de horas. El teatro es más… llena más, te sientes más reconfortada.
El cine es bonito cuando te ves en una pantalla y dices tú, ostras, que esa soy yo, entonces el ego, el orgullo te lo llena mucho. Pero el teatro, esa comunión que tienes con el público, ese feedback que recibes en ese mismo momento, eso es sublime.


¿Alguna vez ha visto una obra de teatro suya en vídeo?. ¿Le gusta analizar su actuación?
Sí, sí, sí, sí, muchas. Y te digo que las veo porque, claro, mi hijo que está en Italia nunca me ha visto actuar en directo. Porque mi hija sí viene a verme actuar cuando puede. Pero mi hijo nunca coincide. Entonces, claro, después las veo con él. Y, primero, no me gusta mucho verme en la tele, porque te ves todos los fallos habidos y por haber y no te gustas nunca. Te dices, ¡Ay qué mal he hecho esto! ¡Ay tenía que haber hecho lo otro! ¡Ay qué falsas se me ve ahí!. Soy muy crítica conmigo misma. Entonces, pues que casi no me gusta verme.

En el mundo de los actores tienen ustedes técnicas para llorar. ¿Estalla usted en lágrimas fácilmente cuando ve una película o una obra de teatro, sabiendo que lo que sucede está tramado?
Cuando eres espectadora, salvo que quieras analizar algo de la cinta, interpretación, etc., te dejas llevar por el hilo. Yo soy muy llorona, o sea, me emociono mucho, me emociona. Me puede emocionar una canción, me puede emocionar un anuncio, me puede emocionar cualquier imagen bonita que vea No hace falta que sea de amor, como ‘Titanic’ o ‘Los puentes de Madison’, que ahí ya encharco el sofá. No. Simplemente que me llegue, sí, que me llegue dentro.

Y si el sueño finge muros en la llanura del tiempo, el tiempo le hace creer que nace en aquel momento. |
Federico García Lorca


¿Cuál ha sido la experiencia más intensa que ha tenido como actriz?
A ver, bueno, como experiencia en el teatro, bueno, lo de Lysístrata, es verdad que fue muy fuerte para mí. Y otro momento al estrenar ‘El Hijo del Hombre’ en el Gran Teatro de Córdoba, eso fue… estar alucinando. Y eso que yo actuaba muy poco. Pero estar ahí y mirar hacia el público y sentir, ¡madre mía!, 900 y pico personas y nos están viendo a nosotros. Es muy fuerte, muy fuerte, muy bonito. Es decir, después de esto ya, no sé. Y ver a la gente de pie aplaudiendo y…
(un par de sorbos de café para no romper la magia de lo que cuenta)

¿Recuerda alguna experiencia divertida haciendo teatro o cine?
Divertida, muchísimas. Es que los ensayos son muy divertidos. Sobre todo el ensayo de ‘Una ruina de función’, eso era desternillante. Porque la obra es desternillante también. Pero es que los ensayos eran divertidísimos. Para mí es una de las obras más curiosas y difíciles, porque fíjate la entrada – salida una puerta a otra en la coreografía que teníamos que tener y con el espacio tan chico que es el escenario de la Casa de la Cultura que ahí detrás estábamos todos metidos, fue genial, a mí me encantó. Es una obra muy divertida y muy difícil

¿Algún momento complicado durante una actuación. Se ha quedado en blanco con el texto…?
La verdad es que va a parecer tonto, pero es que no recuerdo. Quizás este año en el Tenorio, que estaba hablando yo y se me vino la necesidad de toser entonces lo pasé en ese momento un poquillo mal, pero por lo demás, no. Ni he tenido tampoco fallos de memoria, que me quede en blanco… hasta el momento, también toco madera…
Bueno, una cosa ahora que estoy acordándome, claro, no fue en el teatro, fue en la Semana del Libro me encargaron leer una poesía en alemán. Eso fue horrible. Yo estaba en aquella época dando clases de alemán lo pasé fatal, de verdad.

Carmen Partida



¿Cuáles son sus hobbies?. ¿A qué dedica el tiempo libre?, si es que tiene tiempo libre y hobbies, porque con tanta dedicación al teatro y al cine
Me encanta bailar y bailo; me encanta leer y leo; me encanta el cine y veo películas; me encanta ir al teatro, me encanta salir con los amigos. ¿Le parece poco Charles?. Una buena conversación, ¡me encanta!.

He escuchado a algunos actores decir que le cargan mucho los rodajes. Usted hace muchos cortometrajes, ¿Le pesan los rodajes?
Son muy lentos, pero es que a mí me encanta. Estuve ayer, mañana tengo otro y para mí no es una carga ni un trabajo. Voy encantada.

¿Le gustaría dirigir?
Pues no lo he pensado, pero no sé… Como me gusta mandar…

Esa propuesta de hacer de Cleopatra en Madrid, creo que le irá bien a su estilo de registro.
Bueno, aún no está firmada. No deberíamos hablar de ella.
Perdón se me ha escapado. A todo esto, ¿qué personaje le gustaría hacer?
Cleopatra
(Me contagia su risa)
Tengo fijación con Egipto. Creo que debo tener ancestros egipcios.
¿No se ha planteado nunca hacer biografías históricas?
Pues me encantaría. Agustina de Aragón…
¿En qué película conocida le habría gustado ser la protagonista?
Ya se lo he comentado, me reafirmo, me habría gustado ser ‘Baby’ Houseman enamorada de Patrick Swayze en ‘Dirty Dancing’.

¿Dónde le gustaría estar dentro de un par de años? ¿Le gustaría hacer una película o una obra de teatro en la Gran Vía de Madrid?
La verdad. Sería un sueño inalcanzable. Eso sería una utopía para mí ahora mismo. Pero sí, me encantaría. Me encantaría.
A veces sólo son muros en la llanura del tiempo, recuerde a Lorca.

¿Sé que es usted humilde, pero le mueve algo el «quiero dejar huella», alguna dosis narcisista en su camino?
Hombre, ¿ qué si me gustaría que se conociera a Carmen Partida? ¡Sí!. No a Carmen López Partida, sino a Carmen Partida, sí me gustaría. Claro. Y es que es tan importante sentirse apreciada.
Creo que es un deseo que tenemos todos, más que el dinero y el poder, incluso estos se rinden o tienen razón de ser en la búsqueda de encontrar que nos quieran un poquito. Creo que todo el mundo queremos trascender. Sí, sí, creo que todo el mundo quisiéramos sentirnos un poco bien mirados, bienqueridos. Dejar nuestro legado. Con un poquito de admiración o de reconocimiento en lo que hacemos, aunque sean cosas sencillas.


Su trabajo como actriz está más fuera de Antequera que dentro. ¿En qué momento vio acelerar su su ritmo de actuaciones?
En el momento en que di el salto de ir a Málaga. Sí, ahí empezaron a abrirse ventanas.

Ha dicho que le gusta leer. ¿Qué tipo de libros le gustan?
Uy, libros, me gustan muchos. Me gusta mucho leer. Me gusta los libros, siempre tengo alguno y dedico a leerlo un tiempo cada día.
Me gustan los libros que me hagan sentir tanto lo bueno como lo malo. O sea que me hagan sentir miedo, dolor, lágrima, alegría… De hecho, si empiezo a leer un libro y a las primeras páginas me tiene que enganchar. ¡Cómo no me enganche en las primeras páginas!…
Estamos todo el día comprando libros. Mis hijos me regalaron ‘Reina roja’ y me he comprado los restantes de la trilogía de Juan Gómez Jurado: ‘Loba negra’ y ‘Rey blanco’. Ahora estoy leyendo este último.


¿Tiene una hora ritual determinada para leer?
No específicamente, en ratos, a lo mejor un rato leo, antes o después de estudiar, antes de ir a la cama, más el fin de semana que tengo menos cosas que hacer, o si estoy viendo la tele, apago la tele y me pongo a leer. Sí, te pones a ver la tele te atontas en ella, ya te das la tarde en el sofá viendo perdida en vanalidades.

Del 1 al 10, póngase nota como actriz.
Hoy por hoy. A ver, me pongo un 7,5.
Concédase un puntillo más para llegar al menos al notable alto, ya le he dicho que me recuerda en gestos y momentos de sus actuaciones a Ana Magnanni y a Charo López y ellas son un 10.
Hablamos de hoy por hoy, pero si me pregunta dentro de unos meses, con todo lo que estoy aprendiendo y voy a aprender, le diré como mínimo un 9.
Ahí. Sí señora. Es ahí, donde hay que tener el ánimo.
¿Cree que le queda mucho por aprender?
Sí, muchísimo. Muchísimo. Me queda mucho que aprender.
Pues entonces va a salirse de puntuación.
Gracias Charles, es usted muy amable.
¿Cree que juega un papel importante la edad en este oficio?
iSíiii!. Sin duda Y para las mujeres es más delicado que para los hombres. A los hombres maduros los llaman más. La mujer, si ya eres mayor ya no te llaman tanto. Pesa mucho la edad.
O sea que el tema en una mujer es contrarreloj. O encasillarse en determinados papeles de abuela.
Sí, de ese tipo.
Tampoco es malo, a mí me enamora María Galiana, la abuela de Cuéntame. Y en todo caso, a usted le quedan al menos 25 años para disfrutar de otros papeles.
Sí. Uhhhh
(ríe con risa de niña)


¿Se ha sentido alguna vez rechazada en algún papel por la edad o algo así?
Claro, en algunos sitios que ni siquiera te llegas a presentar porque si ves los casting ya te ponen la edad, te delimitan y la mayoría de las ofertas son para gente joven, lo cual me alegra también porque hay movimiento. Pero, por eso digo que me da rabia haber empezado más tarde. Tan tarde.

¿En su opinión, la actuación es más de don o de técnica?. ¿Alguien que no tenga ese don no es un buen actor?
Si aprendes la técnica, sí. Lo que pasa es que eso se nota también. Se nota. Igual que el que baila y no lo lleva dentro, sino que ha aprendido a bailar, se le nota. Que sí, que moverá la mano muy bien, pero parece más artificial si no hay algo dentro. Es que el arte hay que sentirlo. Si no lo sientes…
Lo tienes que llevar que salga por los poros de tu piel. Después ya te pueden enseñar a proyectar la voz, te pueden enseñar a moverte en el escenario… porque el actor, aunque actuar sea mentir, tiene que dar verdad. Si no, no. No es creíble.
¿Usted es más técnica o más don?
No, yo técnica no, yo soy más de dentro.
Sitúese mentalmente, por favor: escena baile tango, Al Pacino y Gabrielle Anwar, película ‘Esencia de Mujer’. ¿Vio la película? ¿Le parece una escena bonita?
Preciosa.
¿Analiza escenas de cine buscando encontrar claves académicas?
Cada vez más. Ayer estaba viendo una peli, no me acuerdo qué película, era una serie. Y es verdad que digo, o sea, ahora veo el cine de otra manera. Ahora analizo más una determinada toma. Lo veo de otra manera. Al haber estado desde dentro, lo miras intentando eso que dice usted, encontrar otras claves. Y las obras de teatro y las series.


Un día perfecto para usted, ¿cómo sería?.
Hombre a mí el día más perfecto es siempre cuando estoy con mis hijos. Para mí no hay otros días que superen eso, pero bueno un día perfecto… es que realmente son todos los días. Afortunadamente no tengo días imperfectos, porque todos los días le encuentro algo bonito por lo que sonreír.

¿Es usted muy agradecida a la vida?
Sí. Agradezco cada día. Hoy por hoy.

¿Hoy por hoy? ¿No siempre ha sido así?.
No. Por eso agradezco cada día lo que tengo y lo que soy, hoy por hoy.

¿Cambiaría algo de cómo la educaron?
No, porque yo creo que mis padres me educaron como pudieron, como supieron y yo creo que no me educaron «malamente», me dieron muy buenos principios, muy buenos valores.

¿Se peleaba mucho con sus padres?
Lo habitual. Que si llegó a las 10 y media… Sí, por la llegar tarde, esas cosas normales.
¿Su infancia fue feliz?
Muy feliz. Sí.
¿Lo ha transmitido a sus hijos, ha intentado que para ellos fuera la suya igual de feliz?
Era mi empeño fundamental, me volqué por entero a mi hija y a mi hijo. Yo siempre he sido más madre que mujer. Y me dediqué a mis hijos por completo. Les he dado muchos besos, les he dado muchos abrazos, les he dicho muchos te quiero y ellos a mí. Creo que en su infancia también han sido muy felices. Además de mucho amor, les dimos raíces y alas, ambas necesarias para encontrarse en la vida.

¿Qué le preguntaría al futuro si tuviera una bola de cristal?
Es que el futuro lo voy haciendo día a día. No le preguntaría nada. No. Me gusta que me sorprendan. Pero no por el miedo al futuro. No, no, sino porque me gusta que la vida me sorprenda. No me gusta saber lo que va a pasar, me gusta cada día levantarme y decir, hoy tengo esto. Y lo incorporo.

¿Usted no es de metas?
Las miro, pero soy más del camino. De ir disfrutando el camino. De tratar de saber apreciar en cada vivencia diaria todo lo bueno que tiene.

El mundo es infinito; la vida es infinita; cualquier seguridad es falsa. Todavía estáis en la hora de la peregrinación. Todavía estáis en esa hora en que el camino es mejor que la posada. | Antonio Gala

¿Cuál es su mayor logro?
A nivel personal, el mayor logro es estar donde estoy con quienes comparto mi vida y mi tiempo y de la forma que estoy. También he aprendido a valorarme, he aprendido a quererme a mí misma, y eso es muy importante.
En cuanto a algún logro a nivel profesional en mi trabajo o en mi carrera de actriz, me gusta mucho y me siento muy bien en el Museo, haciendo lo que hago, y con mis compañeros de trabajo. Y estoy encantada con mi dedicación a mi formación permanente como actriz y con las actuaciones que me salen. Feliz de compartir reparto y experiencias con otros actores y actrices tan majos tanto aquí en Antequera como en Málaga.
Quienes siguen mi trayectoria dicen que he avanzado mucho, que evoluciono muy bien en este arte de actuar, así que la siembra del esfuerzo vale la pena.


¿Sus recuerdos más valiosos?
Como le he dicho están unidos a mis hijos y a mis nietas, mis padres, mis hermanos, mis amigos.

¿Qué dicen de usted sus amigas y amigos?
Que se puede contar conmigo. Que sé escuchar. Que abrazo precioso. Que soy un buen paño de lágrimas. Que me pueden contar lo que sea, que se queda entre nosotros. Que saben que estoy siempre. Que soy muy leal…
Pues es una envidiable carta de recomendación en esta vida. Puede estar usted muy orgullosa.
También lo estoy de ellos. Es mutuo, mis amigos también son así.
La amistad es para mí fundamental. Una buena amistad es una persona que va a estar ahí siempre, la veas todos los días o te tires diez años sin verla. Pero cuando la necesites, ahí va a estar. Me siento rica en este sentido, tengo un mundo de buenos amigos. Como yo digo, tengo más de lo que me merezco.

Un verdadero amigo está siempre a tiempo; los demás, cuando tienen tiempo. | Will Shatner

¡Hay que ver lo que da de sí el tiempo de un café!. Perdone que la haya entretenido tanto. Y gracias por haberme atendido.
Antes de irme quiero decirle que me parece sanamente envidiable y muy bonito su agradecimiento a la vida, que manifiesta permanentemente en sus escritos en redes. Es que es curioso porque un mes antes está agradecida, un mes después sigue agradecida. Siempre está aún más agradecida todavía.

Es que estoy agradecida. Cada día estoy agradecida. Cada día estoy más feliz.

Pues eso, que es muy bonito y muy inspirador encontrar personas como usted que saben apreciar lo bello de vivir, y dedicarse a ello con su serena vitalidad. Esos son logros. ¡Enhorabuena!

Ah. Ya que le gusta leer, busque información de Anna Magnani y de Charo López. Encontrará mucho de ellas en usted, aunque no se lo crea. Gestos, integridad, filosofía, conceptos, modos…


Carmen Partida es el nombre artístico de Carmen López Partida. Es Diplomada en Turismo. También inició en su día estudios de Psicología, y tiene en su haber multitud de títulos de cursos y talleres sobre distintas facetas del conocimiento.
Trabaja en el Museo de la Ciudad de Antequera
Su vida artística empezó en la Escuela Municipal de Teatro de Antequera en el año 2016, aunque anteriormente había sido uno de los «motores» de la Asociación de Baile de Antequera.
Más tarde, cuando la Escuela de Teatro empezó a formar parte de la Asociación de Teatro de Antequera cada año ha representado una y en ocasiones hasta dos obras diferentes a final de curso. De algunas de estas obras pueden visionarse los vídeos en el Canal de Youtube de Antequera Teatro
Por orden cronológico ha participado en:

  • Escenas funcion fin de curso (2016)
  • El caso de la mujer asesinadita( 2017)
  • La dama del alba (2018)
  • Monólogo (2018)
  • Bodas de sangre(2018)
  • Lysístrata (2019)
  • Abre el ojo (2019)
  • La bella Dorotea(2021)
  • La Casa de Bernarda Alba(2021)
  • Qué ruina de función (2022)
  • La Venganza de Don Mendo (2023)
  • Don Juan Tenorio (2021-2022-2023)
  • en el 2023 ha representado también dos obras, ya con La ‘Compañía Teatral Manantial del Ojo’ de teatro profesional que aún siguen en cartel porque se seguirán haciendo en 2024:
  • Adán y Evo
  • El Hijo del Hombre

En 2021 empezó también en la ‘Escuela de Cine y Teatro de Málaga’ y en 2022 y 2023 y para el 24, sigue en la Escuela de Cine ‘Studio Atralla’. En ambas ha hecho escenas o cortos. Ha realizado anuncios publicitarios y participado como figurante en 3 películas.
También pertenece al grupo amateur de teatro en Málaga, ‘Teatrices’.

En esta vida que nos ha tocado vivir nada es fácil ni gratis, todo tiene un coste y no me refiero al económico, pero nunca hay que tirar la toalla, siempre hay que ver el lado bueno de las cosas.

El mundo te romperá el corazón de todas las formas inimaginables, eso está garantizado y yo no puedo explicarlo, como tampoco la locura que llevo dentro ni la locura que llevan los demás.

La vida nunca es justa pero debes afrontar los golpes y seguir adelante. Y cuando tengas el corazón roto tendrás que volver a construirlo y, no solo eso, tendrás que volver a confiar y ésta es la parte más difícil. A pesar de todo esto, aunque la vida rompa todas tus ilusiones debes seguir soñando, ¿sabes por qué? porque si no te ilusionas, si no sueñas, si no amas ¿ qué clase de vida estarás viviendo? ¿para qué quieres una vida si no la estás aprovechando?

No se puede vivir con miedo toda la vida. La vida es así: te caes, te levantas y te vuelves a caer. Pero, si ni siquiera te mueves por temor a caerte, en realidad, ya te has hundido. | Carmen Partida / 18 agosto 2019. Facebook