Crítica teatral de ‘Picos Pardos’ | Por Juan A. López Rama

Aunque me fue imposible hacerlo antes, no debo ni quiero dejar de expresar también por escrito mi enhorabuena a los compañeros y compañeras de Picos pardos y a su directora Elena Moreno por traernos teatro del bueno, con personajes tan auténticos, tan vivos, tan bien interpretados y sostenidos con tanta gracia y naturalidad en escena. Para regalarnos una obra bastante redonda, que nos hace reír hasta la carcajada, mientras nos toca el corazón y las entrañas.


Una obra necesaria ahora y siempre. Una crítica a la hipocresía, un canto a la vida y al amor con sus infinitas formas de sentirlo y expresarlo libres y sin ataduras. Teatro sencillo, directo y eficaz. Con personajes del día día marcando el rumbo a esos hipócritas desnortados que aún en estos tiempos tan «avanzados» tecnológicamente son incapaces de entender con empatía las diferentes opciones del amor y el sexo en libertad desde el respeto, como bien expresó el entrañable personaje (¡qué gran interpretación!) del asistente social en su alegato final.

Una suerte de trágicomedia que no eludió, en esta revisión del texto teatral de Picospardo’s de Javier García-Mauriño, premio Lope de Vega estrenada en 1995, la dureza crítica cuando fue necesario:

—Me alegro que mi hijo al final haya muerto. (No recuerdo si es la frase textual que dice la madre, muy bien interpretada por cierto, pero creo que ese era el mensaje).

Me llamó la atención perplejo, que una persona que fue a ver la obra el sábado me dijera que a ella y a otras no le gustó nada esta frase.

Puede que a veces no nos agraden ciertos aspectos de la dura realidad diaria… Pero no deberíamos culpar de ello a la ficción teatral, y sus intérpretes, que los evidencian para denunciarlos con certeza y lucidez… En fin, como dice el refrán «al que le pique que se rasque…». Aunque nadie llegará a hacerlo nunca con el arte y la gracia infinitos de nuestra querida compañera Pili Parejo en su sublime interpretación de ese personaje tan adorable.

La representación me trajo a la memoria algunos versos de «Cada loco con su tema» de Serrat:

«Cada quién es cada cual
y baja las escaleras como quiere
pero, puestos a escoger, soy partidario
de las voces de la calle

Más que del diccionario
Me privan más los barrios
Que el centro de la ciudad…

La razón que la fuerza
el instinto que la urbanidad…
Prefiero los caminos a las fronteras..

Bailar a desfilar…»

Entiendo que el teatro no solo debe entretener y divertir al personal (que ya es algo meritorio y luminoso). Además, como cualquier otro arte, debe ser atrevido, provocar e incomodarnos, dejarnos un pozo de reflexiones. Ser como un espejo que nos enfrenta a nosotros mismos con nuestras sombra y luces.

Vuestra magnífica representación de Picos pardos, a mi modo de ver, es una obra redonda porque además de vuestro concienzudo trabajo de dirección e interpretación recoge y nos transmite con acierto todo esto que he comentado. Con muchos detalles a analizar y resaltar. A mí me resultó, por ejemplo, sobrecogedor poder ver tantas actrices y actores que permanecen mucho rato en escena ante el escrutinio del público, también sin hablar, y lo bien que superáis esa prueba sosteniendo en todo momento a vuestros personajes. Todas y todos. Que no es cosa fácil. Una obra, un gran compromiso de equipo, que merecería muchas más representaciones. También fuera de Antequera.

«A quien le importa… » ¡Ay, cómo disfrutamos cantando y bailando con esa despedida tan acertada y gozosa…!

Magistral también como se le sacó tanto partido a un escenario tan pequeño para dar cabida a tanto mobiliario, a un elenco tan numeroso, a tantísimo arte…

Juan A. López Rama

Elena Moreno es una gran actriz y una excepcional directora teatral. Profesora de la Escuela Municipal de Teatro de Antequera. Las obras que dirige tienen siempre una esencia especial y los Musicales que prepara son dignos de Broadway o de la Gran Vía de Madrid.

Una sonrisa parecida a esta tenía este fin de semana 25 y 26 de mayo al finalizar la representación que sus alumnos y alumnas de la Escuela Municipal de Teatro de Antequera subieron magníficamente a escena.

Sabemos que te encanta el Teatro. No te pierdas las próximas obras en escena. Giglón dosifica en el tiempo la puesta a la venta de entradas, así que tendrás que estar pendiente para no quedarte sin butaca.